lunes, 7 de mayo de 2012

La madre de mis esquejes

Probablemente los arces palmatum sean mi especie favorita de los caducifolios. Qué lástima que no se puedan recuperar en nuestros montes.
Este que os muestro comenzó como un esqueje que me regalaron en el 99. Era algo como esto.

Nunca he intentado engordarlo. Siempre ha sido cultivado en maceta de bonsai.
Toda su formación en estos años se ha limitado a pinzados. Lo he utilizado mas como fuente de esquejes para regalar y para hacer otros árboles, que en otro momento os enseñaré.
Cuando tengo la suerte (frecuente por mi zona) de que haya mucha diferencia térmica en su otoñar los arces me regalan una gama de colores realmente espectacular.

Lo suelo trasplantar cada dos años. 
Aunque todo aficionado conoce estos pasos, pongo fotos del proceso este año.
Eliminando el sustrato viejo.
Un poquito de agua a presión ayuda enormente.
Recortando un poco el flequillo.
De nuevo a su maceta.
 Bien atadito para que no se nos escape.
Una capita de musgo que ayuda a mantener la humedad y además embellece el conjunto.


 Y unos días mas tarde ocupando su sitio en el gallinero.

Ojalá os haya gustado.
Un saludo.

2 comentarios:

  1. gran evolución de las que se le tiene cariño especial,a mí se me han muerto casi todos los plantones por un fallo del equipo de ósmosis,les tienes un cariño especial ,enhorabuena

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